Karl Marx: El fantasma del comunismo

Sergio Salazar Aliaga

Qué fácil es agitar un pañuelo a la tropa solar, del manifiesto marxista y la historia del hambre. Qué fácil es suspirar el gesto del hombre que cumple un deber, y regalarle ropita a la pobrecita hija del chofer. Qué fácil de enmascarar sale la oportunidad. Qué fácil es engañar al que no sabe leer. Cuántos colores, cuántas facetas, tiene el pequeñoburgués. (“Canción en harapos” 1971 Silvio Rodríguez).

Las canciones que escribe Silvio Rodríguez son fascinantes, sus flujos de poder son políticamente progresistas, de izquierda y revolucionarias, es por eso que nos sentimos identificados con la nueva trova, como parte de nuestro canto, cuando habla de comunismo lo muestra como una ideología que ha sido emancipadora y aporta una mirada realista y hasta nostálgica en su canción de harapos, es notorio como apunta a un movimiento político-social organizado, y también la formación económico-social.

Entonces al comunismo podemos definirlo como una organización social, como una propiedad colectiva de los medios de producción y de la riqueza producida, y sobre todo podemos atribuírselos a los clásicos de Marx, ya que la doctrina fue fundada por Marx y Engels, sobre la base de la concepción materialista de la historia, el comunismo es la etapa que sigue al socialismo, pero exclusivamente cuando las clases dejan de existir.

Sin embargo Marx no fue el único que pensó en comunismo (El comunismo existía mucho antes de Marx y Engels, como ejemplo a esto podemos observar a Platón que creo una sociedad supuestamente perfecta, totalmente idealista), También en el manifiesto comunista versión 29 de julio de 2005 explica que: “La palabra comunismo proviene de común, y los primeros cristianos eran comunistas, tal como nos los presentan los hechos de los Apóstoles, pues todo lo tenían en común, y la palabra “comunión”, tiene el mismo origen etimológico que comunismo. Engels en el prólogo a la edición alemana de El Manifiesto Comunista de 1890, indica acerca del término comunismo: “En 1847, el “socialismo” designaba un movimiento burgués, el “comunismo” un movimiento obrero. El socialismo era, a lo menos en el continente, una doctrina presentable en los salones; el comunismo, todo lo contrario. Y como en nosotros era ya firme entonces la convicción, de que “la emancipación de los trabajadores sólo podía ser obra de la propia clase obrera”, no podíamos dudar en la elección de nombre. Más tarde, no se nos pasó nunca por la cabeza, el modificarlo.”.

El marxismo tuvo tres fuentes 1) la filosofía alemana, 2) la economía política inglesa y 3) el socialismo francés.

Algunos autores comenzaron hacer críticas de la sociedad en la que vivían, pensaban en una sociedad sin antagonismo de clases, es decir sin grupos sociales, uno de los exponentes del socialismo francés fue Gracchus  Babeuf con la “conspiración de los iguales”, una vez que fueron derrotados los revolucionarios franceses (Jacobinos) trataran de seguir con la revolución y tomar el poder para instalar un régimen socialista, redistribuir la riqueza por igual, estableciendo una propiedad común, educación y trabajo, pero  esas ideas se fueron diluyendo el momento de su ejecución, donde sus teorías fueron abandonadas.

Es donde aparecieron nuevos intentos socialistas, bajo el Gobierno de Napoleón “Estado liberal-burgués, que se ha prolongado hasta nuestra época y se generalizo en casi todo el mundo. Por eso es que Napoleón Bonaparte es llamado cabalmente el “albacea de la revolución burguesa”” (Valencia, 1969:143), entonces aparecieron en Francia tres exponentes máximos que fueron Saint Simón, Fourier y Owen conocidos como los socialistas utópicos ya que sus ideas no tenían una base científica y por lo tanto no se los podía aplicar a la práctica.

Estos socialistas utópicos se inspiraron en el “comunismo igualitario” Fourier establece el “socialismo pacífico” el cual genera una contradicción en el desarrollo ideológico, ya que los socialistas crean una crítica al comunismo igualitario a tal punto de considerarlo burlo y simplista.

En el caso del Conde Saint Simón se trataba de crear una organización nueva, una sociedad dirigida por los industriales, para promover el bienestar de la clase más numerosa y pobre, en otras palabras es la primera vez que se habla de una “economía planificada”, fundar una nueva religión con reconocimiento del trabajo como medio del hombre y por supuesto acabar con la dominación de los ociosos (habla exclusivamente de la nobleza, del clero y la milicia),

Lo que para Fourier era la transformación del trabajo en una actividad voluntaria y placentera para la sociedad, también se basa en la concepción de comunismo utópico, que quiere establecer un sistema de pequeños grupos de comunidades, todos comunes y cooperativas de consumo, para evitar que los ricos se hicieran más ricos, su dinero recibiría menos intereses y el que tuviera menos lo contrario, un emparejamiento de riqueza, agro-industrias a las que llamo “Falansterios” y unas ideas sobre la emancipación femenina.

Robert Owen tiene ideas sobre mejorar la legislación fabril y bajar las horas a la jornada laboral, ya que no pudo implementar su sistema tuvo que acercarse a los comunistas utópicos, entonces se manifestó sobre el cambio social, habla de las fuerzas productivas, es la primera vez que se habla con ese término y que el marxismo recoge posteriormente.

Para el marxismo es muy importante el aporte de estos tres ilustres socialistas, pero aparecerán otros tres con mayor influencia, Augusto Blanqui, que es partidario de la lucha armada, de una revolución armada, y que también fue el primero en hablar de la “dictadura del proletariado” sólo a que diferencia de Marx habla de una minoría y no mayoría. Proudhon considerado como un fiel anarquista y sindicalista en la práctica, es fundador de las sociedades mutualistas, escribe “Filosofía de la Miseria” que Marx para el invierno de 1847 responde con “Miseria de la Filosofía” donde establece los principios fundamentales de sus nuevas concepciones históricas y económicas, en su prólogo el 15 de junio de 1847 escribe:

“El señor Proudhon tiene la desgracia de verse incomprendido de singular manera en Europa. En Francia se le reconoce el derecho de ser un mal economista, porque tiene fama de ser un buen filósofo alemán. En Alemania se le reconoce el derecho de ser un mal filósofo, porque tiene fama de ser un economista francés de los más fuertes. En nuestra calidad de alemán y de economista a la vez, hemos querido protestar contra este doble error. En las notas de José Aricó: Marx se dice aquí alemán y economista, pero él escribirá más adelante que Proudhon nos fuerza a recobrar nuestra condición de alemán y que “los economistas son representantes científicos de la clase burguesa”.

El lector comprenderá que en esta labor ingrata hemos tenido que abandonar frecuentemente la crítica del señor Proudhon para dedicarnos a la crítica de la filosofía alemana, y hacer al mismo tiempo algunas observaciones sobre la economía política. (Marx, 1981:10).

Blanc: “de cada uno con arreglo a su capacidad y a cada uno según sus necesidades” fue un líder obrero partidario de un socialismo basado en elecciones, divisiones de poder, cámaras y por supuesto nada de revoluciones armadas, ni luchas.

Marx comenzó a refutar a todos estos socialistas utópicos y anarquistas, es donde sobrepone el desarrollo histórico con la base en la lucha de clases y separa a la sociedad como a una gran familia. Su segunda obra “La Sagrada Familia” es la crítica a Bruno Bauer donde demuestra “la lucha de los contrarios” es decir la lucha entre capital y trabajo, clase obrera contra la clase burguesa: luchas de clases.

Es decir que para los socialistas utópicos, el problema social pasaba por la “justicia social” basados en la ignorancia tanto de los explotados como de los explotadores, y no replantearon la contradicción de intereses que se manifiesta en la lucha de clases, es donde Marx y Engels desarrollaron su teoría sobre el estudio científico de la realidad social y el desarrollo del comunismo científico. Esto se lo puede ver en los principios del comunismo de Engels “catecismo de los comunistas” y por supuesto en 1947 aparece el “manifiesto comunista”…”que ya es hora de que los comunistas expresen a la luz del día y ante el mundo entero sus ideas, sus tendencias, sus aspiraciones, saliendo así al paso de esa leyenda del fantasma comunista con un manifiesto de su partido” (Marx, 2007:155)

El manifiesto comunista

Karl Marx y Federico Engels escriben uno de los libros más leídos en el mundo en el año de 1848 por encargo de la “Liga de los Comunistas”, entonces sale un folleto llamado manifiesto comunista, pero titulado originalmente “Manifiesto del Partido Comunista”, es la primera vez que el mundo observara el pensamiento marxista en forma sistemática y escrita, en español aparece en México en 1870.

Cuando publican el Manifiesto es un llamamiento y exclusivamente está dirigido a la clase obrera para que exclamen: “Trabajadores de todos los países unidos” y demanda exigencias tácticas de ocasión coherentes y con una exposición muy clara de un sistema muy difícil, es un instrumento, para mover por razones y sentimientos a tomar una postura definitiva frente al permanente problema de por qué de la estructura de la sociedad.

En este manifiesto Marx hace referencia de las clases sociales como en la mayoría de sus textos, es evidente que hablar de Marx es hablar de las clases, las relaciones de clase y la lucha de clases, como fundamento del materialismo histórico, pero también es muy difícil encontrar una teoría de las clases por la abstracción de cada uno de sus textos.

Para el año de 1982 el 5 de marzo le escribe una carta a J.Weydemeyer donde le dice:

“Mucho antes que yo, algunos historiadores burgueses habían expuesto ya el desarrollo histórico de esta lucha de clases y algunos economistas burgueses la anatomía de éstas. Lo que yo he aportado de nuevo ha sido demostrar: 1)- que la existencia de las clases sólo va unida a determinadas fases históricas del desarrollo de la producción; 2)- que la lucha de clases conduce, necesariamente a la dictadura del proletariado; 3)- que esta misma dictadura no es de por sí más que el tránsito hacia la abolición de todas las clases y hacia una sociedad sin clases…” (Marx, 1972:56).

Es decir, que para Marx la revolución va ser mediante la lucha de clases hacia una sociedad sin clases, en el caso de la burguesía su revolución implicaba una realización de su clase, el proletariado en su victoria de lucha de clases busca la autosuperación de las clases en una sociedad sin clases, es decir el proletariado con el control pleno sobre las relaciones sociales de producción, al suprimir su anterior “burguesía” como modo de ser.

Dentro de lo que ahora podemos concebir como el derecho laboral, se estipula que la ley general del trabajo reconoce el derecho de “asociación en sindicatos, que podrán ser patronales, gremiales, profesionales, mixtos o industriales de empresas para actual como tal el sindicato…” (LGT, art.99). Respecto a esto, Marx habló que poco a poco los obreros forman grupos o uniones de pequeños grupos, los cuales hacen resistencia de la explotación en las fábricas, y así se comienzan a reproducir en diferentes fabricar para dar nacimiento a lo que llamamos “Sindicatos”. Ahora lo más importante que habría que entender es que estos sindicatos no están solamente para ganar un mejor salario, o más prestaciones y que con eso ya triunfaron, sino que el verdadero triunfo es cuando los patrones hayan desaparecido.

Cuando Marx habla sobre la abolición de la propiedad privada hay que hacer una distinción gigante en el sentido estricto de su pensamiento y de las campañas en contra del comunismo, que prácticamente se asemeja a la película de Steven Soderbergh en el filme: “La última gran estafa” en este caso “La última gran mentira”, es así que la clases privilegiada burguesas, llenas de intereses nos enseñaron que el “comunismo” nos quitará la propiedad privada, nos quitará nuestras casa, autos, etc. Pero en el Manifiesto Comunista nunca se habló de tal cosa.

Marx hace una diferencia entre “propiedad individual” y “propiedad privada”. En el caso de la “propiedad individual” el bien inmueble constituye una posesión legítima que se compra con el fruto del trabajo, se la respeta y garantiza, esa propiedad individual forma parte de la libertad individual, de independencia.

En la “propiedad privada” Marx habla exclusivamente de los medios de producción como característica del capitalismo, la propiedad privada de los medios de producción de la clase burguesa, la acumulación originaria de capital (punto de partida) fue cuando el productor directo (trabajadores) y los medios de producción se (separan), volvemos a la lucha de clases y a una revolución proletaria para que el obrero, el trabajador vuelvan a ser dueños de sus medios de trabajo, como ruptura de la apropiación capitalista del plusvalor.

La plusvalía consiste en el valor que el obrero que percibe un salario por su labor genera por encima del dinero que representa su esfuerzo laboral. Ese valor que podría definirse como trabajo no pagado al obrero, queda en poder del capitalista, quien ve en la plusvalía la base de la acumulación monetaria.

Entonces el comunismo no niega el derecho de poder comprar lo que uno quiera como persona individual, lo único que niega es el apropiarse lo que por derecho corresponde a todos.

Hoy podemos ver casos particulares y universales como ejemplos: Los bosques, que implica en Bolivia el Territorio Indígena Parque Nacional Isidoro Secure TIPNIS, agua, petróleo, gas, medios de comunicación, fábricas, etc.

This entry was posted in Noticias and tagged , , . Bookmark the permalink.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.