48 aniversario del asesinato de Carrero Blanco.
(El título ha sido autorizado por el presidente del PP, señor Casado)
De siempre y de todos es conocido que la verdad tarde o temprano sale a la luz y 48 años son ya muchos años para que el pueblo español, adormecido e intoxicado durante décadas por los Gobiernos de turno y sus terminales mediáticos siga, ni uno solo más, inmerso en la mentira y la ignorancia política, social e histórica en relación con el dramático acontecimiento vivido por este país el 20 de diciembre de 1973. Los españoles deben saber, debemos saber, de una vez y por todas, la verdad, la absoluta verdad, la (si me lo permite el lector) la puñetera verdad, la realidad de lo que ocurrió a las 09,27 horas de aquél nefasto día de diciembre de 1973 en la calle Claudio Coello de Madrid, con el almirante Carrero Blanco como desgraciado protagonista. ¿Por qué lo mataron? ¿Quién lo hizo? ¿De qué manera? ¿Por qué fue todo tan fácil? ¿Por qué en el entorno del lamentable suceso nadie se enteró de nada? ¿Por qué no se detuvo inmediatamente a los ejecutores? ¿Por qué pudieron salir de España de rositas, no se les juzgó y, encima, se les indultó?
La pregunta es: ¿quién daría esa orden? ¿Un general o coronel en la reserva? Evidentemente, no.