Por Víctor Arrogante.
Las tensiones entre Rusia y Ucrania han encendido las alarmas en el ámbito mundial, que hablan abiertamente de la posibilidad de una guerra entre esos dos países, jaleada por los Estados Unidos y por la OTAN que la pronostican y esperan con el ánimo de sacar tajada. La Unión Europea está de oyente y España de actor figurante, sin que a nadie de los actores protagonistas les importe su papel, salvo a quienes denunciamos su presencia en la zona. El conflicto viene de lejos en la historia. Me referiré a los acontecimientos de 2014 que provocaron la matanza de Odesa.
La pregunta es: ¿quién daría esa orden? ¿Un general o coronel en la reserva? Evidentemente, no.